Home > Restaurante Esquirol: Gastronomía ceretena en el corazón de los pirineos
Restaurante Esquirol: Gastronomía ceretena en el corazón de los pirineos
Hotel Esquirol
El restaurante ubicado en Llívia, ofrece un amplio menú donde poder degustar los platos típicos de la Cerdanya.
La gastronomía ceretana tiene una gran riqueza de productos alimentarios autóctonos, gracias a su privilegiada situación geográfica, marcada por su naturaleza de meseta montañosa, que son la base de su sabrosa cocina tradicional y uno de los principales atractivos turísticos de la comarca. La proximidad de las culturas occitana y francesa contribuye a la particularidad de su gastronomía. Su cocina es variada, con platos típicos y tradicionales provenientes del huerto, la caza, las aves o la ganadería, propios de cada época del año.
La afluencia del turismo de esquí durante la estación invernal, ha creado un sector de restauración destacable en la zona, que ha impactado en la oferta gastronómica. Sin ir más lejos, en Llívia encontramos el Hotel Esquirol, uno de los pocos alojamientos del municipio que cuenta con un servicio de restauración. El Restaurant Esquirol ofrece un amplio menú diario y de fin de semana, donde poder degustar platos típicos de la zona, como el Trinxat de la Cerdanya con huevo frito o el surtido de embutidos de la comarca, así como especialidades como el bacalao al horno con tomate gratinado con alioli, la fondue de queso o los pies de cerdo al estilo del xef.
‘El Trinxat de la Cerdanya es uno de los platos más solicitados de nuestra carta. A pesar de ser un plato calorífico que ayuda a combatir las bajas temperaturas de la temporada invernal, también puede degustarse durante los 365 días del año’ señala, Edu Vidal, gerente del Hotel Esquirol.
Al llegar la noche el Restaurant Esquirol ofrece un amplio menú nocturno, donde las familias con niños pueden disfrutar de deliciosas pizzas, hamburguesas y platos combinados sin tener que desplazarse. ‘Nuestros huéspedes, sobre todo las familias con niños, agradecen el poder cenar en el restaurante, y no tener que desplazarse para comer alguna cosa’, afirma el gerente del hotel. El alojamiento cuenta con un total de 20 habitaciones, alguna de ellas con magníficas vistas a las montañas pirenaicas. Uno de los valores añadidos del hotel, es su privilegiada situación, que permite disfrutar de una estancia de relax, naturaleza y tranquilidad, en un entorno ideal para la práctica de los deportes de invierno.